Advertencia

Este blog ha sido diseñado para que pueda realizarse una lectura, de un texto de San Bernardo, cada día del año. No obstante, en esta fase se unificarán progresivamente los capítulos para que también puedan leerse como pequeños libros completos. Igualmente se añadirán las cartas de San Bernardo, que nos permitirán hacernos una idea cronológica de en qué época y circunstancias fueron hechos tanto los escritos como los sermones (están en un blog aparte)

miércoles, 30 de mayo de 2012

CAPÍTULO XXVI: GRADOS DE ORGULLO Y SOBERBIA


 Capítulo  26


     Señor Jesús, también yo, con muchísimo gusto, me gloriaré, si lo permite mi debilidad, en la rigidez de mi articulación, para que tu fuerza, la humildad, llegue en mí a su perfección; pues cuando mi fuerza desfallece, me basta tu gracia. Apoyando con fuerza el pie de la gracia y retirando con suavidad el mío, que es débil, subiré seguro por los grados de la humildad; hasta que, adhiriéndome a la verdad, pase a los llanos de la caridad. Entonces cantaré con acción de gracias y diré: has puesto mis pies en un camino ancho. Así se avanza con mucha precaución; se sube peldaño a peldaño la difícil escalera, hasta que, incluso arrastrándose o cojeando en la misma seguridad, se logra la verdad. Pero ¡desgraciado de mí! Mi destierro se ha prolongado. ¿Quién me diera alas de paloma para volar raudamente hacia la verdad y hallar el reposo en la caridad? Pero como no las tengo, enséñame, Señor, tu camino, para que siga tu verdad; y la verdad me hará libre. ¡Pobre de mi, que he bajado desde esa altura! Si por ligereza y dejadez no hubiese bajado, no tendría ahora que afanarme con tanto tesón para subir, y tan lento.
     Y ¿por qué digo que he bajado? Sería mucho más acertado decir que caí. Es cierto que, así como nadie sube a lo más alto de repente, sino que avanza paso a paso, del mismo modo nadie se hace un malvado de la noche al día. Se va bajando poco a poco. Si en la vida se procediera de otra forma, ¿cómo podría afirmarse que el malvado se ensoberbece todos los días de su vida, y que hay caminos que parecen derechos, pero llevan a la perdición?

No hay comentarios:

Publicar un comentario